Pegue el giro. Camino por la calle y veo una pareja en discordia, veo llantos, gritos e insultos: me emociono. Extraño los males necesarios. Desatando la paciencia corro en penurias al mar de sanguijuelas. Rodando cuesta abajo chamullo con Sísifo.
Prendido a tu constante, otra vez la duda, soñarte ¿Es un milagro o una pesadilla?, caminos extraños de voces leves, perturbando el tiempo el goce desata la arritmia de los recuerdos. Dame el “no” a la idea de la esperanza, comprende a los astros y coloniza los espectros.
El aura negra, los castillos, y el mal augurio. Telas de seda y batas diabólicas. Hay que volver al peso muerto en sangres blancas. Ahora te miro en el imaginario, blanca piel extremista. Huella y rastro de campos hedonistas, rol mundano de carne egoísta.
Patrono del sentimiento, empolvado en letras.
miércoles, 2 de abril de 2008
Muestras
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3 comentarios:
Si, si. Justo he estado viviendo la pesadilla de no olvidar a una persona que ya pertenece solo al pasado.
Es frustrante cuando no puedes saber que es de otras vidas, y aun les añoras.
Creo que se trata más de una pesadilla amigo filósofo...el pasado debería desaparecer y nunca fue mejor que el presente, jajaj, puro optimismo de mi parte...ni negro, ni rosa...busquemos algo de equilibrio en el termino medio, medio lleno en lo posible...hedonista hay demasiados, muchos, que además se juntan con los discapacitados emocionales porque tienen puntos en común o todo...aveces también lo somos nosotros...
Un abrazo
esos males necesarios..
usted será uno??
belleza y alma...eso es seguro.
mis saludos
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