domingo, 31 de mayo de 2009

Estoy comprometido con una situación.

En este escrito no radica, por distintas cuestiones, otra posibilidad de comienzo que no sea esta: Mi amor, escribo por vos.

Hay un despliegue de un movimiento que juega entre lo trágico y lo sublime. Un sentimiento que pone pequeñas bombas de emociones. Escuche de tu boca un “te amo”, y sé que solo mis oídos entenderán lo que quisiste decir, y mi cabeza se sumerge en un mudo estremecidos de energías que causan descargas de todo tipo. Una lección que se aprende todos los días. Un conocimiento que crece en mis sentidos depositados en los tuyos. Un escondite de escapatorias, unas cosquillas placenteras. Muchos tipos y estilos de diálogos. Guerra, defensa, autodefensa. Para Platón, la felicidad sólo es posible en el mundo inteligible. Yo me siento “pleno” en vos, en nosotros. Está bien, la felicidad es un estado psicológico, por lo tanto “inteligible”. Amenazando la frialdad del contemporáneo pintaría calidamente los “dones” en donde el amor es un don desinteresado solo en apariencia. Sartre decía: «Dar es esclavizar», a ver como explico esto que quiso trasmitir este tipo tan jodido como Sartre, creo que la cuestión es así, el prójimo no quiere ver en mí sino a un objeto y de alguna manera muy extraña negar mi humanidad. Lo acepto sin insubordinaciones. Pero deseo ser para él el fin absoluto, el objeto imprescindible al que deba subordinarse por completo, algo de lo que no pueda no depender. De este modo recuperaría mi ser al “esclavizar” a aquel que me ha alienado (uso acá alienado como un estado de locura, un estado mental caracterizado por una pérdida del sentimiento de la propia identidad.). Es por eso – por esa recuperación del ser – que el amor es “un don en sí mismo”. Con respecto a esta idea sartreana, se cree, o se revienta, no se cree, no se revienta, lo sentís o no lo sentís. Yo no lo siento ni lo creo. Lo mío es mas “poderoso” mas “interno”. Pero siempre es bueno saber que melodía toca otra campana. Te entrena tus categorías de pensamiento.

Ahora a los que observan la vida ajena, les propongo que se despeguen de la idea de “control”, de la idea de la “tele”, en donde todo tiene que ser “mirado” solo eso, no observado, ni visto, solo “mirado” para luego ser trasmitido. El “ver” de la inteligencia es el “viste”. Entrenen sus sentidos, acordes a sus sentencias. Muchos de ustedes que nos están mirando, solo tienen tiempo para eso, por que han sido dejados en un juego de espejos donde nunca nadie abandona el círculo de la protección de lo ajeno. El otro es siempre una amenaza ontológica. Nuestro cuerpo nos hace vulnerables para la mirada del otro. Nos sitúa como un objeto entre otros en una especie de mosaico empírico de espacio y tiempo. Un médico ve nuestro cuerpo del modo en que nos lo examina. Para observar el cuerpo hay que transformarlo en objeto, del mismo modo que algo es observado en un microscopio. Nuestro cuerpo nos brinda perspectiva en el mundo, pero otros lo ven desde afuera. Aún cuando vemos nuestro reflejo en un espejo, no nos vemos a nosotros mismo como lo hacen los otros. No tenemos control de cómo somos vistos por los demás. La mirada de los otros nos convierte en objetos. Que lo disfruten, es un placer muy vicioso y difícil de dejar el de mirar dos cuerpos, dos almas, dos espíritus, dos consciencias que se aman a su manera.

miércoles, 27 de mayo de 2009

Del suelo

1



En continua inconducta las manos ya no me responden. Mi tristeza una vez más ha volcado en mí toda su artillería pesada. Otra vez me muestra que soy su causa. Tengo una preocupación disimétrica, voy a estar, como siempre. Pero también estoy pensando.



2



Combinando estados voy dándole un lugar a cada cuestión que se intromete en mi sensibilidad. La falsa valentía me esta generando rechazo. Nietzsche decía: “La sabiduría, lleva a la inacción” Mis limitaciones me apuñalan una y otra vez, insisten en no darme en puntos vitales, solo quiere mi agonía, que suele reponerse en oxigeno, de seguro, pero cuando ya no lo necesito. Si el solo hecho de pensar en alguien te emociona, significa que esa persona, sin duda, se “filtro” en tu alma. Lo errores no se pagan, o se solucionan o se padecen. La libertad de nuestro error es infinita. Una falla no es un error. Mas de una vez propongo el diálogo con lo no-dicho, con lo im-pensado. Plantear la apertura de aquello que está velado y que se resiste a su total esclarecimiento. Dar reconocimiento de que el saber queda siempre corto frente a lo que se oculta como misterio, enigma o secreto. Cosas necesarias para la vida.



3



Podría escribir (o cortar y pegar) tremendas psicopatologías psicológicas, libertades falsas, “lo que me contaron y nunca viví” o transgresiones más viejas que la escarapela, en una palabra, hacer lo que se hace en el blog de Elsa Cicuta. (De paso lo promocionamos) ¿Pero qué sentido tendría? ¿Ser un cerdo o un pez? ¿O una mezcla de los dos? O sea, un boludo que “aletea en el barro”. Si pudiera elegir, no seria nada de eso, seria el “19” de la “18 Whiskys”.



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La clave de muchas cuestiones va a estar en el reconocimiento del propio cuerpo como algo que parece ser inherente a nuestra conciencia. Reconocer que la consciencia arrastra a algo que consideramos como nuestro cuerpo, y ver que existen otros cuerpos, nos llevaría a pensar por analogía, que esos otros cuerpos deben tener una consciencia como la propia. La prueba del otro se da en el cuerpo del otro. Cuando me pongo de frase de nick “la resistencia de lo sensible”, hablo de de la experiencia originaria que tenemos desde nuestro vínculo sensible con el mundo. El vehículo más completo para la realización de dicha experiencia es el cuerpo. Antes de cualquier representación, el cuerpo tiene y comprende su mundo; eso es algo que no proviene gratuitamente del pensamiento. Cualquier representación espacio-temporal requiere que el sujeto haya tenido una experiencia con su cuerpo; en este sentido, cuerpo es anclaje con el mundo, arraigo del espacio en la existencia. Es la manera en que me “planto” frente a mi existencia. Podría haber una especie de “yo metido” que, junto con el mundo, son una sola sustancia o como diría Merleau Ponty, “forman parte de una misma carne”.



5



De la sonrisa de la muerte saque dos conclusiones: La primera es que no es sardónica. Y la segunda que no es ambigua. Entonces continúo viendo como decís carcajadas de palabras estrategas en malestares. Espero que lo días pasen y no pasan. Creo que fui crucificado antes de tiempo. Ahora recuerdo que hace mucho escribí “tengo estrategias para que se devele tu lado más malo” Yo no creo que sea así, pero en algún lado quedo escrito. Lo que nunca haría, seria manipular “una soledad” En un momento me puse de experimento para esa tarea, y las mutaciones que tuve fueron difíciles de revertir. Me molesta que mi tranquilidad siga estando en momentos en los cuales naturalmente no tendría que estar. Entonces me autointranquilizo Si conoces la plantación de paciencia te recomiendo que recojas sus frutos, los da durante todo el año, te van a servir. La frutera de mi alma esta llena de ellos, pero en algún momento se acabaran; y ahí más que nunca necesitare la tuya, tu paz y tus abrazos.

martes, 26 de mayo de 2009

Argot

Mi lenguaje esta muriendo. Los conceptos y las categorías de pensamiento, lloran ante la inminente agonía. No habrá velorio, ni palabras de recuerdo. Será un entierro sobrio y discreto; como lo que nunca fue en vida. Encastro coherencias inútiles. Les pido perdón por haber pensado que un escrito necesita “sentido”. Quizás estaba demasiado despierto.
La conquista de un territorio, la guerra, atacando cuerpo a tierra. Bombardeos y resistencias. Un Oeste yanky, con tramas propias. Me disgrego en un médium y comprendo fantasmas. El código propio, ya está instalado, solo que ahora se empieza a notar. Los padres mueren y los hijos también. Pero siempre queda una resaca. El agua y la hospitalidad son esenciales en medio del desierto. Tres son multitud; más aún en un desierto. La muletilla del perdón, sostiene al pensamiento rengo. Si la continuidad en un hecho da marcha atrás, se parece al pasado. No me insistan ya lo dije, estoy dando más de lo que tengo.

domingo, 24 de mayo de 2009

Alteracción

Voy caminando la noche. Al “fondo” del barrio, arrancaron a los tiros, los escucho desde acá, algo debe haber pasado. Eran descargas continuas y directas. A mi izquierda una pelea de perros, por lo que veo de reojo son dos contra uno, el ruido del combate es terrible, “me angustia”. Sigo mi camino, no intento separarlos, solo me limito a sufrir por el más débil. La noche tiene esas cosas. Sufrimientos, tristezas, alegrías, y faltas de oxigeno.

Uno es caprichoso con lo que quiere tener al lado. Las estrellas diminutas y otoñales, bañan la paciencia de impaciencia. Descomentar una situación es eludir su sentido. Me sumerjo en una formula de sensaciones de ausencia. El verdadero amor no crea “costumbres”. Todo surge en el camino de intercambios, de almas que tiemblan, ante el impacto de la sensación. En el medio del agua tenés dos opciones, o hacer la plancha o nadar. Prefiero nadar, aunque el agua también me lleve. Marcel Proust decía que el amor es una enfermedad inevitable, dolorosa y fortuita. Lo que yo llamaría una “Alteracción”. Las tendencias hacia un cuerpo específico, se perfeccionan en una comunicación mucho mas nutrida. Date cuenta, como modificamos el mundo, su realidad. Nada mejor que una conversación nuestra, para explicar el mundo. Las etapas se van prendiendo fuego. Una de las libertades falsas, pero muy bien representada simbólicamente, puede estar en el video “Crazy” de Aerosmith. Y el video “Fall to pieces” de Velvet Revolver, le responde casi sartreanamente con un nockaout directo: “Uno está condenado a ser libre. El hombre nace libre y responsable”.

Voy a seguir este camino en la luminosidad templada, soñándote, pensándote, extrañándote. Quizás doble la esquina y de la nada empiece a sonar “Glass Onion” de los Beatles y yo acomode mi andar a su ritmo y aparezcas vos con ese rostro tan hermoso, y esa sonrisa a medias que electrifica mi cuerpo, y te abrace y te bese, todo eso con un cierta fuerza natural. Otra vez tengo mucho para sentir. Voy a darte lo que siento. Voy alterar nuestros accionares. Me voy a quedar en vos.

miércoles, 20 de mayo de 2009

El eslabón perdido

Exclamé gritando: ¡Les advierto, de acá no me saca nadie, hasta que me devuelva el alma! Todos se miraron entre ellos, asustados, absortos. Y me miraban a mí como si tuviera un arma en la mano. No la tenia, mi única arma fueron mis palabra y su tonalidad de guerra. Aunque de seguro mi cuerpo también pensó y tomo postura de “ataque” y mis ojos miraron de otra manera.

En la esquina están chafando y yo miro nulo el hecho casi consumado. Recuerdo tu tono de voz en celo, y compruebo que todavía esas vibraciones están en mí. Todos “se piensan” atrevidos ante la vida; yo creo que nosotros “lo somos”. Ya lo dije, yo no remonto nada, me gustan las cosas que se arrastran. No hay que avisar que uno “está” sincero; hay que serlo todo el tiempo.

Voy derramando la lengua en mi mismo barro, por que del barro venimos. Tu lengüita, picara, y estratega, hace estragos en mis sentidos. Pero cuando se pone firme, también habla como la espada. De un lugar a otro incubo la impaciencia, esa que vos conoces a la perfección. Me derrito en señales, símbolos, mensajes. Juntos no existe “el rato”; “somos”.

La caminata sonora, en velos de una siesta de noche, que duerme en campanas, que suenan inauditas ante el eco verídico de voces “ninfa” que supuran la inconciencia, lo demencial de un gusto agridulce. Un eslabón con estrabismo no puede fijar su cadena, que lo “condena”. Un suero de mañana, el llanto alegre del sol que no cayó, sino que subió. Y la basura cósmica sembró estrellas en nuestro jardín. Flor de planeta el nuestro. Agallas como garras, que entran y salen, pero siempre están afiladas. Secuencia de transe en la escritura disforme, petrificación del sentido en comentarios idiotas. Salvavidas tu pensamiento, lugar de mi compleja simplicidad. Tus palabras “anidan” en mí, así como tu tacto. Hay “nidos”, de los cuales solo se puede salir volando. Las ideas te preparan para entrar un poco más. La cabeza no me aturde, solo se limita a dolerme. Costumbre e inercia, dan forma a los buenos tratos. Lo nuestro, no tiene forma, como todo instinto. Una noche de verano, con un grillo de fondo, en medio de un pleno invierno, amerita filósporria y aire libre. Y de paso evito la pared de mi cuarto, que en las noches habla más que yo. Un embrujo de miradas hace alquimia de la comunicación. “Los perdidos que encontraron” ¿Qué encontraron? Encontraron “El perdido encuentro” Y así podría seguir mi sugestión dialéctica indefinidamente. “Lo perdido” tiene nuestras posibilidades, así como las de él. Lo mismo va ocurrir con “Lo encontrado” Todo esta muy caprichosamente organizado por las necesidades concientes e inconcientes.

A veces el ruido de la lluvia me hace bajar la presión. Siento como que me invade desde el interior hacia al exterior.

La cadena que se sale, no es la que se rompe.

martes, 19 de mayo de 2009

Mas se acerca Junio, más frío hace.

Un perla y una rosa, se confunden con el viento. Con mi cuerpo desnudo, agotado, señalo con mi dedo temeroso un reloj de sol. Te indico que una vez más, el sol comienza a bajar. De vez en cuando, se prende mi antorcha para dar calor a la estación. Hibernum, solsticio caprichoso. Tu mayor grandeza es hacer las noches más largas, por eso nací en vos.

El inframundo se apodera de “la que lleva la muerte”. Hades, dios del inframundo, secuestra a Perséfone para hacerla su esposa. Invierno.

Perséfone llevaba una vida pacífica hasta que se convirtió en la diosa del inframundo, no por voluntad propia, sino porque Hades la raptó y la llevó allí con él. Perséfone estaba juntando algunas flores inocentemente con algunas ninfas en un campo en Enna cuando Hades apareció, emergiendo de una grieta del suelo y se la llevo. Luego las ninfas fueron transformadas en las Sirenas por no haber intervenido en impedir el rapto. La vida, entonces, quedó paralizada mientras la desolada Deméter (diosa de la Tierra) buscaba por todas partes a su hija perdida. Helios, el sol, que todo lo ve, terminó por contarle lo que había pasado. Finalmente, Zeus no pudo aguantar más la agonía de la tierra y obligó a Hades a devolver a Perséfone, enviando a Hermes para rescatarla. La única condición que se puso para liberar a Perséfone fue que no probase bocado en todo el trayecto, pero Hades la engañó para que comiese seis (o cuatro, según las fuentes) semillas de granada, que la obligaban a volver cada año un mes por cada semilla. En algunas versiones, Ascálafo contaba a los demás dioses que Perséfone se había comido voluntariamente las semillas de granada. Cuando Deméter y su hija estaban juntas, la tierra florecía de vegetación. Pero durante seis meses al año, cuando Perséfone volvía a los infiernos, la tierra se convertía de nuevo en un erial estéril. Durante el tiempo en que su hija está con Hades, Deméter se entristece y provoca el otoño y el invierno.

Mis labios son congruentes en los tuyos. La suavidad de tu ser, me desaprisiona de un frío caprichoso, que ignora la calidez de una situación. Podemos hacer el milagro de mostrar a los demás un amor que enceguece, por que las consecuencias no estarán a “la vista” toda la posible comprensión será interna. Nosotros solo estamos “siendo”. No sé como llegamos a esto, creo que aparecimos de golpe. Algo que te desconecta del pasado, te obliga a vivir en un presente continuo, y eso es siempre estar al “límite”. Es desafiante en sus movimientos. Transcurre como si “todo”. Mi habitación ya de por sí es muy fría. En invierno lo es aún más; por eso extrañamos tu presencia, que llena de perfumes y calores este iglú de tu ausencia. Mis manos quedaran grabadas encastrándose en tu cintura. Un choque necesario. Mi lengua destripara tus entrañas. Mi alma salpicándote todo el cuerpo, sembrará el delirio en un gemido estrangulado. Y afuera seguirá siendo un frío invierno.

lunes, 18 de mayo de 2009

Bhārat

Sus vacaciones fueron productivas recorrió, Bombay, Calcuta, Nueva Delhi, Chennai Hyderâbâd, Bangalore, Ahmadâbâd, Kânpur, Poona, Nâgpur, Lucknow y Jaipur. Toda la India brillo ante sus ojos, pero el recuerdo de fuego , marco el conocimiento de su cultura, observo que la mayoría de los matrimonios se dan entre miembros de una misma casta o grupo social, y a demás son arreglados por los padres de la pareja. Después de la boda, la nueva esposa vive con la familia de su marido, por lo que es frecuente ver a varias familias compartiendo la misma casa, formando parte de una larga cadena familiar. Él era un extranjero, anti familiero cien por ciento , siempre pensaba que si dabas la mano se tomaban el codo… imposible para él pensar en concretar en seriedades esos golpes de amor; y menos aun casarse… Él sólo aspiraba a ver esos ojos teniendo un orgasmo (si es que ella los abría en semejante momento). Arriesgarlo todo, según él, valía la pena. Ella tenia los rasgos étnicos bien grabados, era una especie de Shilpa Shetty pero con mas senos. Era un espíritu en danza. Él la conoció en el Taj Mahal , ese palacio construido por el caprichoso rey Shah Vahan, un palacio hecho entero por ,y para el amor, ahí tuvo la milagrosa suerte de cruzar miradas con ellas y apreciar su anormal belleza. Fue todo destinal, todo apropositamente ambientado. Incomunicado por la lengua solo dialogaron con miradas, astutas, prendidas fuego, todo estaba claro “atracción divina” dirían por esos pagos. Él decía, “Magia India” superfluos esquejes de erotismo, en posibles brotes violentos. Sóplo de corazón viento. Nunca fue de él. Solo que en sus 12 noches de estadía ella se le presentaba infaltable en sus sueños. Él despertaba lagrimeando… empapado en sudor, y salía corriendo hacia el Taj Mahal...

domingo, 17 de mayo de 2009

La nube

Hace unos días que me persigue la nube. Todo maso menos. Los espías espirituales trabajan, y a mi se me rompe la tecnología. Cada uno purga sus males, las malas energías, a su manera hace catarsis. Para el 30 de mayo faltaba mucho, a parte son tantos mis males que podía haber dejado sin almas a todos ese día. Por eso me fui a tocar la guitarra. Enchufe el equipo, con un sonido grave y limpio, y toque blues y melodías varias que improvisaban sobre mi estado anímico. Y toque muy bien, como nunca. Estaba solo y me escuchaba a mi mismo. Y tocaba sin parar de pensar en ella, y en como estaría “realmente”. En estos momentos me di cuenta de que me sirve más una guitarra, que mis libros de filosofía. ¿Estaré retrocediendo en el tiempo? Schopenhauer dijo que cada nota musical, es una especie de botón que activa un estado de emoción dentro de nuestro ser, una nota, te puede poner triste, alegre, alerta, furioso. Mis notas me daban forma de un spleen, narcotizado por el amor que siento hacia una mujer “de otro planeta”. Regalan en un fiesta cigarrillos Harmony, en los cuales mi sugestión, me hace verle letras chinas en su envoltorio, y ahí te pensé hasta casi perder la conciencia. Recuerdo y sigo tocando.La nube no se disipa, deja caer sobre mí lluvias de desesperaciones encapsuladas. Otro día, otra tarde en la China.
Noche. Fauna abisal. Día incoloro. Yo sé que no soy el primero, lo sé muy bien. Las manchas de otros tigres se las llevó un pobre y viejo Lobo. El amor verdadero siempre decepciona al que no esta preparado para asumir su verdad, su esencia. Te hace llorar, como en las novelas. Te aclaro, los cobardes se suicidan. Pero también Nietzsche escupió: “El pensamiento de suicidio, nos hace pasar más de una mala noche”. El acorde de arriba sigue en pie y voy a desatar mi lengua, y no voy a perdonar si ofendo; desempolvo ese cuaderno de tapa dura, viejo, que tengo oculto por ahí, que nadie conoce, que nadie leyó, y que ahora solo en su imaginación está su existencia, por que sé que en el reina el caos que no se dice. Lo abro y me limito a copiarme, a transcribir lo que hay en el acá, lo que en algún momento ya escribí. Ahora me dispongo a copiar y veo que nos escritos, son “cosas” cortas, no sé que cosas, pero son cosas escritas; ya está no me queda otra, voy a empezar a transcribir. Antes la ultima aclaración, estos escritos, no están ligados entre si, ni son un mismo escrito, por lo que veo no fueron “cosas” escritas con una regularidad, en algunas quizás si la idea o el concepto sea regular, lo que no significa que hayan sido escritas ese mismo día. Y en otras no hay nada regular o hasta quizás lo que se llama coherente. Son independientes. Ahí van:


Era una tarde de lluvia, por la ventana miraba y veía, a mí alma reflejada.
Siempre juegas con nuestras vidas!


Ese otoño, la asesiné, pero no recuerdo los motivos. Sé que me dijo: Te amo.


Me queme con los ojos con pólvora. El sol. La foto rota, y la sangre mancha el mingitorio extraviado.

No se asusten, todavía es mentira que degollé al vecino metafórico. Acorde.

Ando anda: la sustancia dura, aún tibia, punzante, que su cuerpo no pude aceptar, y calla bajo el sol opaca cubierta de sangre.

Sé que tengo que mejorar en lo social. Algo de simpatía y calidez, decía Schopenhauer, permiten manejar a la gente, así como necesitamos calor para moldear la cera.


La persona realmente sensata no se pasa la vida tratando de caérles bien a los demás; de hacerse simpática. Es una quimera.

Alguien no tolera que no le presten atención, y el otro no tolera que ya no le presten atención. Los dos están a merced del capricho de lo que piensan los demás. En una palabra, la felicidad, para ambos, está en manos de otros Y para ambos la solución es la misma: cuanto más tenga uno en su interior, tanto menos pretenderá de los otros

Es difícil dirigirse hacia mí. Resulta difícil hablar cuando alguien nunca te mira. Por qué lo hago: prefiero reservarme la respuesta; sin dejar de mirar el techo. El echo de no mirar al otro cuando hablo, puede llegar a ser interpretado por el otro como “que estoy en otra parte”. Tengo que indagar en mi mente. Mirar al otro a los ojos me distrae cuando quiero buscar la respuesta.


Platón decía que el amor está en quien ama, no en quien es amado.


En varias oportunidades he comprobado que cuanto menos contacto tengo con la gente, tanto mejor estoy. Cuando uno intenta vivir la vida siempre se ve arrastrado por la confusión.


“Para no ser un mero juguete en manos del bribón ni sufrir el escarnio proveniente de los necios, la primera regla es ser reservado e inaccesible”

Arthur Schopenhauer



lunes, 11 de mayo de 2009

Es complejo

“Sigue mi consejo, no sientas demasiado apego

por el sol ni las estrellas.


Ven, baja conmigo al reino tenebroso”



(Goethe. Ifigenia III,I).



Defiendo una verdad en su origen. Enfrente un campo de imaginación conceptual mentiroso. Dios y yo, sabemos que es verdad. Eso no significa que mi paz se mantenga ante lo “injusto”. Soy un monstruo agazapado en conceptos, mi discusión es otra. Percibo que no hay comunicación, no hay comunicación de conceptos. Algo está roto. Ella me conoce mejor que nadie, cartografié sus entrañas al salir de ellas. Herede su olfato. Hay que tener cuidado con lo que se pude llegar a imaginar sobre un dato real, y con que intensidad se imagina. Y desde ya sus agregados. Por que esta imaginación se puede llegar a tornar “real” y “verdadera” para quien la acuño con insistencia de herrero. Me desarmo y me rearmo en una duda que apesta a moral “tan mal puede pensar alguien de mi” Sí, puede. La parte más punzante es que yo todavía puedo llorar al quebrarme; pero ella si el llanto se refiere a mi “ser”, ya no. Por adentro pienso: “Bueno, hace un esfuerzo”, un pensamiento “cubito”. Leibniz te digo una cosa, acá, no hay “fuerza” que “pueda”. Ahora tengo el cuerpo frío y la cabeza caliente. Me siento realmente mal. Lo contingente exige lo necesario. Yo trato de explicar algo en un dialogo que tiene “jerarquizaciones” ya alguien se paró más arriba, usa un poder estupídamente psicológico. En palabras filosas y cotidianas explico: La libertad no implica necesidad. Cuando las artes de la argumentación fracasan, el último recurso son los insultos y las ofensas. Me quede a desgano, me quema toda la casa. Me voy a “reposar” este miserable cuerpo, y esta extrovertida conciencia. Antes dejo una esquirla de la vida filosófica:



Examinar los aspectos nocturnos de la experiencia humana, masticar una explicación verosímil. Naturalizarme en un mundo telúrico, gótico y oscuro, que eclipsa la luz diáfana de la razón.

La voluntad es la esencia de todo. Mi estado me revela cosas, y pienso en concientizarme de la incapacidad del deseo para dar la felicidad, y así negarme a seguir el juego a las trampas de la voluntad, las ilusiones del deseo y el placer. No hablo de querer morirme, aunque lo pensé, ni suicidarme, que no son más que trampas que solucionan en todo caso ‘tu’ caso, sino de asumir una filosofía de la vida que supere el deseo. Buenas noches.

Psicológicamente Bowie

Hablar de un eterno “futurista” no es fácil. Que éste tema musical me ha recorrido por mucho tiempo, ya es un hecho. Pero el video del mismo ha surcado mi subconsciente, mi inconsciente y mi conciencia. Su simbolismo, su oniria, su mensaje de “piel” es realmente increíble. Recuerden que este tipo fue el que mezclo de manera casi perfecta el “alma” del teatro con la música. Creo que en el blog viejo ya lo había subido uno vez. Intente más de ocho veces escribir un ensayo sobre el mismo, y siempre no llegue ni al mitad, por que al ir mirándolo para “inspirarme” no podía escribir nada; ahí ya estaba todo. Así que bueno, por eso mismo no me queda otra que subirlo una vez más. Para ustedes Thursdays Child de David Bowie (Si quieren y tienen ganas pueden buscar por la web la letra en castellano)











viernes, 8 de mayo de 2009

El otoño en tu lengua

El otoño en tu lengua, y la verdad que no duele.

La plaza tiritando, y un silencio pensante.

Un horizonte de condiciones, y el desmayo en tus dichos.

Mi cuerpo alterado, visiones apocalípticas.

Nuestras imágenes se rompen, para descansar lo real.

Si me voy ahora, te pierdo en un intento. Amor ventrílocuo.

Me ponen “puntos” por todo el cuerpo, en toda acción.

Solo soy un agradecido. Tu boca me invita. Agua.

Novia, novio, pareja, chica, chico. Muerto o vivo.

Piel pegajosa. La confianza entre volándonos, como mariposas.

El frío en la noche entra despacio, la sangre chorrea por tu mano.

Estoy haciendo. Estoy sucio. Estoy con vos. Estoy con el amor.

Impregnado de vos, regreso a mi noche. También muero.

Dame una explicación para no seguir jamás. Rarezas.

Escucho todo y comparto los sonidos. Dame cercanía.

Me quedo, veré si te encuentro.

Me voy, veré si te encuentro.

jueves, 7 de mayo de 2009

Son las 2:41 AM, hace un rato se fue mi amigo Crackity Jones (Luís Peloco) vino a traerme un pila de discos para que me grabe, desde ya Radiohead (deluxes ediciones y lados B) también hay discos de The Breeders, Pixies, Bowie, Iggy Pop, etc. Crackity tocaba la guitarra conmigo en Entelequia, una banda en donde hacíamos rock alquimista. Los dos somos enfermos de la música, nadie entendería nuestros diálogos, son como partituras de la historia y evolución del rock. Cuando hablamos de música nos ponemos el microscopio en la oreja. Crackity empezó a escribir, y por sorpresa trajo unos escritos de los que yo llamo relámpago; me leyó uno cuando ya nos despedíamos. El escrito me pareció muy bueno, así que le dije que lo pase en Word cuando llegue a la casa y me lo mande, que le iba a dar un lugar en mi blog. Así que Crackity ahí va tu “escatológico” relato.



EL BAÑO DE LAS 2:30am



Miro mis pies , pensante , frío , de noche , es ke seré yo o el otoño que enfría el inodoro, silencio oscuro , sensación de fuerza , a la vez plazer , no del goce , sino por largar toda esta mierda de varios días , solfeando , silencioso , escucho ladridos de los guardianes, el echo ya esta consumado , un extraño sentido se activo , ¿eso estaba dentro mío? , verdad que no asimilo sin cuidado y sin remedios, pregunto, ¿los demás también tienen dentro suyo lo mismo, o solo yo soy el podrido? , ¿Hasta las más finas se aguantaran esto? , todos venimos del mismo lugar, ¿porke otros eskivan el tema?, es natural, relajante. Sigo mirando mis pies, rechinándolos para confirmar el final, y pienso, ¿porke a mi se me da por redactar cuando cago? , si, yase, es askeroso, pero verdadero.



Crackity Jones

martes, 5 de mayo de 2009

Dale

Chatarra nocturna. Habitad paranoico. Desenlaces crónicos. Todavía “no lo puede creer” se ve que yo, al ser participe, lo asimile más rápido. Hace unas noches atrás, descubrí que mi vieja podría dar un seminario sobre Foucault. Lo conoce a la perfección sin ni siquiera saber quien es o que dijo. Hay que hacer vivir, hacer vivir es que me controlen el cuerpo, que no me “enferme” para poder seguir siendo parte de la producción de la sociedad, que me vacunen, que me fichen. Recuerden el ejemplo de los leprosos en Foucault. Y para darle mas “actualismo” México en este mismo instante. Por eso no miren tele: psicosis colectiva. Nadie sale a la calle hasta que termine Tilingo: un personaje de la cotidianidad. Las ventanas cerradas para aislarse aun más de lo que se reconocería como real, escupen el mismo tono de voz.

Ando haciendo laburos de aislamientos, necesarios y acustizados. El sonido es lo que hace que cualquier declaración ensordezca. El habitad del silencio es plagado de átomos declarantes que son la “imagen acústica” de nuestro mutuo y propio asesinato. Mostramos una entrega, que se ríe con cierto sarcasmo ante la vida; la deshilacha. Espero que se entienda lo que significa “tramar”. ¿Tendré antenas, como las hormigas? ¿O seré sociable como el Lobo? Despertar a la vida no es malo, así como tampoco es malo tomar licuados de vigilia. Que momentos que me esta dando la vida, la vida en ella. Me muevo en círculos, como un perro que busca echarse en algún lado. Tu ausencia es presencial. Onetti dijo: “La literatura es mentir bien la verdad” Cuanto tiempo sumergido en una historia espesa que se comportaba como garrapata. Cuanto tiempo perdido, así como encontrado.

Odio algunas de nuestras despedidas, “acupunturizan” la distancia en mi ser, en mi cuerpo. Ce hache e. Siempre me resisto a ser inmune. “No estoy con nadie”, “Estoy solo, estoy sola”, “¿Vos sentís lo mismo que él / ella? las puertas entreabiertas al mal entendido. La confusión también tiene una estrategia, hay gente especialista en eso. La viceversa siempre es efectiva, yo sé muchas cosas que ellos no saben, y ellos saben muchas cosas que yo no sé.

Yo sigo reptando tu rastro: Ando de cacería.

lunes, 4 de mayo de 2009

Relámpagos de Federico

Prestá atención al tiempo en que sucederá la transvaloración: en el “crepúsculo”, un crepúsculo es emocional; es el tiempo del sentimiento, del “consuelo” y de la “memoria”: el tiempo de la transvaloración es un tiempo psicológico. La verdad no es un concepto, sino la mentira que ya no reconocemos como tal. El lenguaje es la expresión del poder, no de la verdad. Por eso la comprensión del lenguaje (igual a “cárcel”) es la comprensión del poder. El hombre superior habla, tal vez, para no ser comprendido.
Presumo una contraposición entre la virtud nihilista (rígida, fría) y una nueva idea de virtud, vinculada a la vida. La contraposición a la virtud fría es el individuo dionísiaco (“feliz en el infierno”) que se ha liberado de la moral (kantiana–nihilista) Dioniso vence al Crucificado. La contraposición se establece claramente entre el águila señorial (uno de los símbolos–animales amigos– del Zaratustra e imagen del Superhombre) y el cordero nihilista, símbolo de lo masivo, lo vulgar, lo antiaristocrático. El águila necesariamente debe destruir al cordero, como lo superior a lo nihilista.
El hombre es algo que debe ser superado, como el imperativo del “tu has” kantiano, debe ceder ante el “yo quiero” de la voluntad de poder. En el hombre está la posibilidad de ser “dios” (sentido de la tierra que termina con el nihilismo de los antiguos dioses) o simple oveja.
La felicidad solo se identifica con la voluntad de poder.

domingo, 3 de mayo de 2009

Cocaína, rock y ambigüedades

La droga más sexual. Viajes de ida. Nostalgia adolescente. Psicodélicas en paños. El lugar es chico, como siempre, hace calor, sé que en un rato tengo que salir a tocar, y no me siento bien, me aflojo un poco el pañuelo del cuello y mi propio olor a pachulí me entorpece más. Recuerdo la canción de Ratones Paranoicos: Algo Mal, “No creo que sigas, con esta locura, todos nos sentimos algo mal” Respiro y miro para todos lados sin ver nada. En un rato tengo que tocar. Y en mi mano un vaso que contiene vodka con naranja. Y en mi mano un vaso que contiene whisky con banana. Y en mi mano un vaso que no contiene nada. Y en mi mano un vaso. Y en mi mano, nada. Camino hacia el baño, el cual se declaró “misterioso”, entro, busco por todos lados lo que sé que no perdí. Golpean la puerta, “momento”, digo yo de adentro como un viejo y no como un rocker. “Soy yo”, responde una voz del otro lado; no sé ni quien es, pero digo: “Pasá”. El baño se llena de desconocidos, todos aspiran y suena de fondo Hand of Fate de los Stones. En un rato tengo que salir a tocar. No quiero que me vean mal. Las chicas toxicas me hablan de la fecha del sábado pasado en Villa Bosch, en donde yo le “bajé cualquiera” a un tal “Cuerva”, no se de donde. Quisiera decirle algo parecido ahora a ellas, pero ya perdí la capacidad de hablar, solo asiento con la cabeza y como un chicle eterno. Me llevan a un cuarto a terminar la lista de temas. Están todos los chicos de la banda, con sus respectivas chicas, también hay amigos y amigas. Todos están dentro una gran nube de humo, se escuchan todas las voces entremezcladas, risas y grititos femeninos con olor a alcohol. Me llevo la mano a la cara y me froto los ojos. “Te sentís bien” escucho una voz casi dentro de mi oreja. “Si, si” contesté, levantando la vista para ver quien me lo preguntaba, me doy cuenta de que no había nadie a mi lado. Puff (dije por dentro mío) “Así estoy”, pensé por dentro mío. Bajo las escaleras de mármol blanco, para llegar a la puerta a tomar el famoso “poco de aire”. En el caracol de esa escalera hay sexo, diálogos, peleas. Con mi cigarrillo en la mano me siento una especie de Virgilio paseante. Llego a la calle, respiro lo más profundo que puedo, y pienso: “Acá hay más rock que arriba”. Se me cumplió el tiempo, tengo que subir a tocar. Una vez más antes de subir de vuelta por el lomo de ese caracol me reviso una vez más, me auto palpeo: “¿Carilinas?: están”, “¿Cigarrillos?: están”, “¿Encendedor?: está”, “¿Las llaves de casa?: están” “¿La púa?: está” “¿Mi pañuelo en el cuello?: está” La noche también está, y hay que seguirla. Mi acorde sube con mi alma. Y ellas miran a todos sin parar. Para ustedes será solo una noche más.



sábado, 2 de mayo de 2009

Un muestra al mundo

Muestro una pequeña parte de lo nuestro al mundo, y genera urticaria, genera mas dudas de las que nosotros tenemos. Mis escritos buscan la reacción del silencio, su sonido penetrante. Mis declaraciones solo te buscan a vos, aunque reboten en el deseo chusma del “saber que pasa”. Te diste cuenta que nos estamos riendo más seguido, con más fuerza y más ganas. Eso es parte de lo que viene. Prepárese.

Es verdad, ahora que veo una pequeña marca en mi pecho, me queme de placer. Si es necesario, yo pongo “el cuerpo” por los dos. Noctavandalismo indiscreto, usted bautiza la noche con su perfume. Lo más loco es que todavía no nos tacamos ni un pelo, y andamos explotando como si nos conociéremos de memoria. Uno manipula la realidad inyectándole ficciones y confusiones. Que manera de “prenderse” uno del otro. Lo nuestro hace un gran favor al mundo y a los que nos rodean, por que le regalamos un poco de “imaginación” a sus rutinas de realidad. Yo soy complicado, no niego mis naturalezas. Y vos sos “potente”, detonas siempre en tu jugada. Das el gran paso. Al que esté leyendo éste escrito le digo, que no ronden desde muy cerca lo nuestros, ayer a la noche descubrimos que ambos somos terriblemente peligrosos. Estamos al costado del mundo, fuera de él, nunca en su centro. Lo ornamentamos con nuestras miradas lejanas, le ponemos la cuota de misterios que los demás no quieren pagar por apresurados demostradores de lo que no sienten. Somos lo que creamos, lo que formamos, lo que desde las partículas de nuestros suspiros nos dan el envión a lo “eterno”. Podes mentir a los demás, pero no a mi, sentiría su olor y arruinaría tu perfume natural.

Conjúgame en tus espacios y retornaré en vos misma. Voy a tratar de despoblar los miedos. Veremos, sufriremos, sentiremos, lloraremos, reiremos, soñaremos, en fin nos “Viviremos”. Voy a terminar esto sin pensar, solo escribiendo, solo sintiéndote.

Hasta las manos.